La Viudita - llamada así por su plumaje sombrío y canto melancólico - anida en la zona sur-austral del territorio, desde Valdivia a Tierra del Fuego; en invierno, migra hacia la zona norte llegando hasta Coquimbo, en donde es posible encontrarla, no en abundancia, en los valles y quebradas de la pre-cordillera, zonas costeras e incluso en jardines de ciudades.
Suele pasar bastante tiempo entre el follaje más alto de los árboles, volando cortas distancias y tardíamente. Su silbido agudo, monosilábico y melancólico, es muy característico, lo que permite su identificación.
Nidifica en arbustos, a una altura entre 1 y 2 metros del suelo, contruyendo un nido compacto y alargado, más ancho hacia la cámara de incubación, revestido exteriormente con musgos, e interiormente con gramíneas verdes colocadas en forma circular.
Coloca 3 huevos blancos con pintitas rojizas
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